Preguntada sobre el posicionamiento del sindicato ELA ante el planteamiento de la izquierda abertzale de acumulación, Gil de San Vicente considera, antes de nada, que «las izquierda tienen un problema a nivel organizativo, no se sabe encajar de forma deportiva las críticas». Añade que «estamos en un momento de crisis de los sujetos políticos y tenemos la responsabilidad de ofrecer discursos claros y responsables». Es positiva porque considera que «este pueblo nos va a obligar, o nosotros y nosotras mismas nos vamos a obligar» y se logrará «avanzar hacia marcos de confluencia».