Ha explicado que en otras ocasiones no les han requerido que llevaran a cabo las operaciones que quedan fuera del ámbito de los estibadores, y que la ley marca que en esos casos el trabajo lo pueden realizar tanto los titulares de los barcos, como personal externo.
Tarrega cita como segunda razón “la situación de excepcionalidad, la supresión de la autonomía y la rebaja de los derechos civiles”. Aunque les ampara la ley, preguntado por si temen alguna represalia: “no se lo que ocurrirá mañana”.