Como consecuencia del accidente el piloto del helicóptero, Miguel Angel Troya, murió carbonizado en las inmediaciones de Altzola, al estrellarse el aparato. Además, dos trabajadores de ETB resultaron gravemente heridos. Ambos lograron salir del helicóptero, con el que habían informado de la segunda etapa de la Vuelta al País Vasco, en la que venció el irlandés Martin Earle.