Fue una prisión con una negra fama bien ganada, diseñada para seiscientos reclusos y que sin embargo llegó a albergar hasta seis mil en los peores momentos de la posguerra siendo un lugar de terrible hacinamiento, hambre, enfermedades y malos tratos para los condenados. En los años postreros del fasciofranquismo volveria a conocer entre sus muros un nuevo flujo de presos politicos que no cesaría tampoco durante los primeros años de la Transición en unas condiciones extremadamente duras. Aún hoy, aunque a varios kilómetros de distancia del antiguo penal, se encuentra el complejo penitenciario de "Puerto" -Puerto I, Puerto II y Puerto III- el mayor de toda Europa que sigue albergando entre sus muros a presos politicos vascos o pertenecientes a organizaciones revolucionarias del Estado español, marcando asi que Puerto de Santa Maria sigue teniendo una connotación represiva que desde la memoria de sus inicios llega hasta la actualidad.
De ello hemos hablado con Pilar Peruyera, miembro del "Foro por la Memoria" del Puerto de Santa Maria, y con Sara Gallardo realizadora de cine que junto con la periodista Vanessa Perondi ultima un documental sobre la prisión.
Aqui, en "La Memoria".