Tanto Edurne Goikoetxea como Koldo Arnanz han denunciado que se sienten desamparados e indefensos ante una situación de injusticia que podría ir a más, después de que el caso haya quedado en manos de a Audiencia Nacional española. También han denunciado que Adur Ramirez está en aislamiento por saludar con un "Eskerrik asko" a la marcha solidaria que el sábado llevó la solidaridad desde Altsasu hasta la prisión de Soto del Real, donde se encuentra encarcelado junto con los otros dos jóvenes altsasuarras.