Tras un cambio de última hora del PSOE, el tema del desarme de ETA fué ayer objeto de debate en el Congreso español, debate que el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, aprovecho para oficializar su postura oficial al respecto. Básicamente, y dejando de lado el discurso de vencedores y vencidos que nunca falta, Rajoy vino a decir que “si ETA quiere desarmarse, que lo haga, le parece bien”; aunque añadió que no obtendrá contrapartidas por ello. Un discurso que deja la sensación, porque confirmación no hay ninguna, de que su Ejecutivo no piensa interferir en el programa de desarme de ETA, que culminará el 8 de abril.